Cómo comer bien durante el tratamiento con yodo para el cáncer de tiroides

Si tiene cáncer de tiroides, es posible que le receten un tratamiento con yodo. Si bien este tratamiento puede ser efectivo, es importante saber cómo comer bien durante este tiempo. Esta publicación de blog le dará algunos consejos sobre cómo asegurarse de obtener los nutrientes que necesita mientras evita los alimentos que podrían interferir con su tratamiento.

Comprender el papel del yodo.

¿Qué es el yodo?

El yodo es un oligoelemento esencial para la producción de hormonas tiroideas. La glándula tiroides necesita yodo para funcionar correctamente y producir la hormona tiroxina (T4). El yodo se puede encontrar en alimentos, agua y suplementos. También se agrega a la sal en muchos países para ayudar a prevenir los trastornos por deficiencia de yodo.

¿Cómo afecta el yodo a la tiroides?

La glándula tiroides absorbe el yodo y lo usa para producir hormonas tiroideas. Las hormonas tiroideas son importantes para regular el metabolismo, el crecimiento y el desarrollo. Demasiado o muy poco yodo puede causar problemas con la glándula tiroides. Demasiado yodo puede hacer que la glándula tiroides se vuelva hiperactiva y produzca demasiada tiroxina (hipertiroidismo). Muy poco yodo puede hacer que la glándula tiroides se vuelva poco activa y no produzca suficiente tiroxina (hipotiroidismo).

Beneficios del tratamiento con yodo.

El tratamiento más común para el cáncer de la glándula tiroides es la cirugía para extirpar toda o parte de la glándula. En algunos casos, se puede recomendar la terapia con yodo radiactivo (RAI) después de la cirugía. La terapia RAI usa altas dosis de radiactividad para destruir las células cancerosas que quedan en el cuerpo después de la cirugía. La terapia RAI también se puede usar como primer tratamiento para el cáncer que se ha propagado más allá de la glándula tiroides (cáncer metastásico).

Conoce los alimentos a evitar.

Alimentos ricos en yodo.

El yodo es un elemento esencial para la producción de la hormona tiroidea, por lo que es importante asegurarse de obtener suficiente. Sin embargo, demasiado yodo puede ser dañino, especialmente si tiene cáncer de tiroides. Es importante evitar los alimentos con alto contenido de yodo, como:

•Algas y otros mariscos: Las algas son una de las fuentes más ricas en yodo. Si come mariscos más de una vez a la semana, limite su consumo de platos a base de algas o elija platos bajos en yodo.

•Sal yodada: La sal de mesa suele estar fortificada con yodo. Si usa sal yodada, asegúrese de revisar la etiqueta para ver cuánto yodo contiene.

•Productos lácteos: La leche y los productos lácteos son otra buena fuente de yodo. Si consume productos lácteos todos los días, elija variedades bajas en yodo o limite su consumo a 1 o 2 porciones por día.

Alimentos ricos en bociógenos.

Los goitrógenos son sustancias que pueden interferir con la producción de la hormona tiroidea y causar un agrandamiento de la glándula tiroides (bocio). Algunos alimentos que contienen bociógenos incluyen:

• Verduras crucíferas: las verduras como el brócoli, el repollo, la col rizada y las coles de Bruselas contienen bocio que puede bloquear la absorción de yodo por la glándula tiroides. Estas verduras deben cocinarse antes de comerlas para reducir su contenido de bociógeno.

•Productos de soya: La soya y los productos a base de soya como el tofu y el tempeh contienen compuestos llamados isoflavonas que pueden imitar la acción del estrógeno en el cuerpo e interferir con la producción de la hormona tiroidea. Limite su consumo de alimentos a base de soja o elija variedades fermentadas como el miso y el natto, que son más bajos en isoflavonas.

Elija alimentos ricos en nutrientes.

Opta por carbohidratos complejos.

Los carbohidratos complejos son una parte importante de una dieta saludable y pueden ayudarlo a sentirse lleno por más tiempo. También tienden a ser más bajos en azúcar y calorías que los carbohidratos simples. Buenas fuentes de carbohidratos complejos incluyen:

• Cereales integrales: avena, cebada, arroz integral, quinua, trigo sarraceno
• Legumbres: frijoles, lentejas, garbanzos, guisantes partidos
• Verduras: batata, maíz, calabaza
• Frutas: manzanas, peras, plátanos

Coma una variedad de fuentes de proteínas.

La proteína es esencial para el crecimiento y la reparación en el cuerpo. También es importante elegir fuentes de proteínas magras que sean bajas en grasas saturadas. Buenas fuentes de proteína incluyen:

• Pescado: salmón, atún, arenque, sardinas
• Aves: pollo, pavo
• Carnes magras: ternera, lomo de cerdo, cordero
• Huevos
• Proteínas de origen vegetal: tofu, tempeh, seitán, lentejas, frijoles, guisantes

Incluya grasas saludables en su dieta.

La grasa es una parte importante de una dieta saludable y proporciona nutrientes esenciales como la vitamina A y D. Sin embargo, es importante elegir grasas saludables que sean bajas en grasas saturadas y grasas trans. Buenas fuentes de grasas saludables incluyen:

• aceite de oliva, aceite de canola, aceite de aguacate
• frutos secos: almendras, nueces, pistachos, anacardos
• semillas: linaza, semilla de cáñamo, semilla de chía
• pescado graso: salmón, atún, arenque, sardinas

Considere los suplementos.

El suplemento más eficaz para pacientes con cáncer de tiroides es Graviola Prozono.

La idea de que la graviola es un eficaz luchador contra el cáncer proviene de la investigación de la Facultad de Farmacia y Ciencias Farmacéuticas de la Universidad de Purdue sobre los componentes activos del árbol, sustancias únicas conocidas como acetogeninas anonáceas.

Los investigadores de Purdue descubrieron que eran potentes inhibidores de las células cancerosas y dejaban en paz a las células normales.

También encontraron que los compuestos eran efectivos contra las células cancerosas resistentes a los medicamentos.

Al mismo tiempo, este suplemento tiene ozono. Según demuestran las investigaciones el ozono te protege de la metástasis y mejora la eficacia de los tratamientos médicos.

Apostar por Graviola Prozono es una forma muy inteligente de plantar cara al cáncer de tiroides.

Suplementos de vitaminas y minerales.

Su médico puede recomendarle que tome un suplemento multivitamínico y mineral diario durante el tratamiento con yodo. Esto se debe a que el yodo puede interferir con la absorción de otros nutrientes, como el zinc y el selenio. Tomar un suplemento asegura que está recibiendo suficiente cantidad de estos importantes nutrientes.

Probióticos.

Los probióticos son bacterias vivas que se encuentran en alimentos fermentados o suplementos dietéticos. Pueden ayudar a restablecer el equilibrio de las bacterias buenas en el intestino, lo que puede ser útil en momentos de estrés, como cuando se está sometiendo a un tratamiento contra el cáncer. Los probióticos también pueden ayudar a reducir los efectos secundarios de la radioterapia, como la diarrea y las náuseas.

Ácidos grasos omega-3.

Los ácidos grasos omega-3 son un tipo de grasa saludable que ha demostrado tener propiedades antiinflamatorias. Se encuentran en el pescado, las nueces y las semillas, y también se pueden tomar en forma de suplemento. Los ácidos grasos omega-3 pueden ayudar a reducir la inflamación en todo el cuerpo, lo que puede ser beneficioso durante el tratamiento del cáncer.

Conclusión

Si está recibiendo tratamiento con yodo para el cáncer de tiroides, es importante que preste atención a su dieta. 

El yodo es esencial para el funcionamiento de la glándula tiroides, por lo que deberá asegurarse de obtener suficiente. Sin embargo, demasiado yodo puede ser dañino, por lo que también deberá limitar la ingesta de alimentos ricos en yodo.

 Los alimentos bociogénicos pueden interferir con la absorción de yodo, por lo que también deben evitarse. 

En cambio, concéntrese en comer alimentos ricos en nutrientes como carbohidratos complejos, una variedad de fuentes de proteínas y grasas saludables. 

Los suplementos también pueden ser útiles para garantizar que obtenga todos los nutrientes que necesita. Solo asegúrese de hablar con su médico antes de comenzar cualquier nuevo régimen de suplementos.